Escribe: Suriel Chacon
Los políticos engañan al pueblo, la televisión comercial o basura engaña al pueblo; el periodismo basura (Panorama) también engaña al pueblo. Y, ahora, las empresas transnacionales también le engañan al Perú. En esta ocasión, la marca de “chocolates”, Sublime, está en el ojo de la tormenta, ya que, luego de una serie de pesquisas y evaluaciones realizadas por el Ministerio de Agricultura y Riego, se llegó a la insólita resolución de que la firma transnacional Nestle le estaba metiendo prácticamente el dedo a los más de 31 millones de peruanos al asegurar que su producto “Sublime” era chocolate con maní, cuando en esencia ese producto no era chocolate. No sé qué rayos habremos estado comiendo, pero eso no era chocolate. Y, está 100 % confirmado, según el Minagri.
“Sublime no es chocolate, es una golosina”, enfatizó Ángel Manero Campos, Director General Agrícola del Ministerio de Agricultura (Minagri).
“Estamos trabajando con la industria para tener una propuesta consensuada en el reglamento de chocolates, que además ordene a la industria”, remarcó, Manero Campos.
Lo más indignante de Nestle y su producto Sublime es que le han mentido al Perú con publicidad engañosa: ¿qué les costaba utilizar el verdadero chocolate peruano?, ¿acaso el país no posee el mejor grano de cacao del mundo, incluso las cinco variedades más exquisitas de cacao? ¡Qué tal sinvergüencería!
El referido Director General declaró para un medio de comunicación local: “En el Perú tenemos los chocolates más finos del mundo, y por lo tanto, merecemos consumir un chocolate verdadero”.
DATO IMPORTANTE:
Hubiera sido muy “digno” que Nestlé publiqué una nota en el etiquetado de su producto “Sublime” indicando lo siguiente: “Esto no es chocolate, esto es una golosina”, ya que el porcentaje exigido según ley para que se denomine chocolate es de más del 25 %. Sin embargo, lo óptimo debería de ser de más de 70 % para llamarse verdadero chocolate perucho.