Lamentable historia que nos toca informar desde Tiempo26.com. No sin antes remarcar que en todos los países del mundo existen malhechores y delincuentes, y Chile y Perú no son la excepción. Y, por ese motivo, ningún peruano debería de generalizar a una nación por el comportamiento de algunos inescrupulosos, ya que en Chile hay cerca de 18 millones de ciudadanos y en Perú un promedio de 31 millones de personas.
¿Se imagina que por unos cuantos delincuentes peruanos que han salido del país para ejecutar sus fechorías en los países vecinos nos cataloguen a los más de 31 millones de peruanos como bandidos? No pues, no sería justo, ya que un dedo no hace una mano ni una golondrina un verano. Luego de este preámbulo empezamos con este lamentable suceso:
Los ciudadanos peruanos, Juan Nelson Jiménez Ninaja y José Luis Díaz Ninaja son unos pescadores artesanales, sin embargo, últimamente se han estado dedicando a la extracción de algas marinas en una playa denominada: Quebrada Honda, en la ciudad de Tocopilla, una comuna del norte de Chile, ubicada en la Región de Antofagasta. La actividad de estos dos compatriotas generó mucha desazón en sus “colegas” (pescadores y extractores de algas marinas de Chile), quienes exigían —desde mayo de 2017 y con amenazas— que paren con sus presuntas “ilegales actividades”. No obstante, Juan y José tenían que ganarse la vida y posiblemente habrían hecho caso omiso a las amenazas de estos violentos malhechores, quienes al ver que estos dos pescadores continuaban con su trabajo diario, se dirigieron a su humilde domicilio en Tocopilla e irrumpieron en dicho inmueble, los redujeron, los condujeron a una zona descampada, los golpearon brutalmente y les rociaron gasolina para luego procurar quemar sus extremidades inferiores. Un caso de lo más macabro, violento e inhumano.
Los ciudadanos peruanos, Juan Nelson Jiménez Ninaja y José Luis Díaz Ninaja; pescadores peruanos vivían en una humilde construcción en la ciudad de Tocopilla, capital de la provincia del mismo nombre. Juan y José tras ser víctima de terribles amenazas decidieron regresar al Perú, con el objeto de proteger su integridad, pero para ello necesitaban realizar sus últimas actividades en la playa, ya que no disponían de dinero para los pasajes y así llegar —el 07 de julio de 2017— a suelo peruano. Pero estos bandidos percibieron esa actitud como un desafío y cometieron este lunes un execrable acto criminal contra ellos que por milagro no los condujo a la muerte.
Las autoridades chilenas y peruanas han llegado a la conclusión luego de las investigaciones que bajo ningún concepto se trata de un acto xenofóbico, sino de un posible cobro de cupos o extorsión. No obstante, la hermana de Juan y José, la ciudadana peruana, Fiorella Jiménez Ninaja, afirmó que esto se trata de un acto de xenofobia y mostró estas imágenes:
DATO IMPORTANTE:
Actualmente Juan y José están siendo atendidos en el hospital regional de Antofagasta. Están graves, según fuentes médicas.