No bien arribaron a nuestro país, las ansiadas vacunas concitaron codicia de algunas autoridades, entre ellas, de la entonces ministra de Salud, Pilar Mazzetti, quien solicitó a la Universidad Cayetano Heredia que la inoculen, después de solo 10 días de la llegada de las vacunas chinas Sinopharm al Perú, un 2 de septiembre del 2020. Pero, pidió de manera expresa que se guardara absoluta discreción. Según revelo un reportaje de Panorama, pues la Mazzetti no quería testigos de por medio.
Por ese motivo, solicitó no pisar las instalaciones de la universidad por temor a ser reconocida y fotografiada. Desde ese entonces se evaluaron no una, ni dos, sino tres posibilidades hasta que finalmente el 12 de enero de este año obtuvo su primera dosis en su residencia.
Cabe precisar que, diez días después que la delegación china llegara al Perú, en la víspera, comenzó el desfile de funcionarios por los laboratorios del ensayo clínico.
“El sábado 12 de septiembre diecinueve altos mandos del Ministerio de Salud se vacunaron”, y no precisamente a espaldas de Pilar Mazzetti, según dio a conocer Panorama.
Lluvia de vacunas para los allegados
Los primeros en ser inoculados fueron los dos ex viceministros, Luis Suárez y Víctor Bocángel, además de la mano derecha de Mazzetti: Carlos Castillo, que es su representante personal en las negociaciones para la adquisición de las vacunas, que también aprovechó la oportunidad para que su esposa sea inoculada, sin embargo, no fue el único miembro del comité negociador en la adquisición de vacunas en ser parte de ese escandaloso festín.
Asimismo, ese día también se vacunó el chofer de Suarez, su secretaria, sus asesores, y una serie de funcionarios cercanos al viceministro Suárez.
Lo indignante es que esos personajes no han puesto un pie en el campo de batalla, no han visitado hospitales ni mucho menos viajado a regiones, como se pretendió engañar para justificar su vacunación.
Además, la ejecutiva adjunta Gladys Ramírez Prada, vacunó a su papá y a su sobrina que según Reniec viven en Cusco, su hermano José Ramírez Prado y las hijas de este, Gabriela Ramírez Arredondo de 24 años y Diana Ramírez Arredondo de 27.
Por otra parte, la asesora de Luis Suárez, Mónica Pun llevó a la Cayetano a su madre Julia Chinarro viuda de Pun y a su hermano Juan Pun Chinarro. Su otra asesora María Ormaeche acompañó al viceministro a inocularse juntos la tercera dosis. Todo el despacho ministerial en pleno puso el hombro sin titubear.
El viceministro Suárez, quien recibió tres dosis, incluyó también a seis de sus familiares. Pues vacunó a su hermana María del Carmen Suárez Ognio, su esposa Inés Caro Khan; su hija de 23 años, Juliet Suárez Caro; su hijo de 31 años, Luis Suárez Caros; su sobrina de 28 años, María Acha Suárez, y su sobrino de 26, Mario Acha Suárez.
Con el transcurrir de los días se espera la ora lisa de beneficiados con las “vacunas vip”, además de las sanciones pertinentes por darle la espalda al pueblo y en este caso a sus colegas que, si merecían la vacuna, teniendo en cuenta que muchos perdieron la vida luchando en primera línea.