El presidente venezolano, Nicolás Maduro, decretó el inicio de la Navidad, que sorprendentemente gracias a la decisión del mandatario, se celebrará con dos meses de anticipación en Venezuela, la cual empieza hoy.
Con un mensaje de “impulsamos la soberanía”, el presidente venezolano anunció esta medida cuyos detalles se desconocen. Asimismo, preliminarmente comunicó la adquisición de millones de juguetes para impulsar la economía en el contexto de la pandemia de COVID-19.
Según las cifras oficiales, seis personas más murieron en Venezuela por el COVID-19, con lo que ya son 720 las personas fallecidas por la enfermedad que causa el nuevo coronavirus desde el inicio de la pandemia, según informó la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez.
Para los sectores críticos del régimen de Maduro la decisión con respecto al adelanto de las celebraciones navideñas supone una nueva maniobra para desviar el foco de atención de las múltiples crisis que afronta el país.
Nicolás Maduro también anunció que otras medidas para apoyar la economía de las familias venezolanas, entre las que se encuentran la reapertura paulatina de los lugares turísticos o nuevos créditos para las pymes.
Como se recuerda, Venezuela se encuentra sumida en la peor crisis de la historia moderna, el país petrolero sufre la inflación más alta del mundo y está encaminado a su séptimo año de recesión. En paralelo, el valor de la moneda local -el bolívar- se ha desplomado, escenario en el que el dólar ha continuado ganando terreno al punto de que la mayoría de las transacciones en el país caribeño se realizan con esa moneda.
A finales de abril, el régimen de Maduro aumentó, en 77,7% el ingreso mínimo, que suma el salario básico y un bono de alimentación obligatorio. Fue la segunda alza del año. Pese a ello, y dada la continua devaluación e hiperinflación, el salario mínimo equivale a menos de un dólar, insuficientes para comprar prácticamente la totalidad de los insumos básicos.