Escribe: Suriel Chacon
El 09 de noviembre de 2017, tipo 12.00 P.M., inició, en Curitiba, Estado de Paraná (Brasil), un interrogatorio que fue constituida por 40 preguntas –investigación presidida por el fiscal superior, Rafael Vela– al ex CEO de Odebrecht Latinvest, Marcelo Bahía Odebrecht. Como se recuerda, el otrora empresario brasilero se encuentra recluido –por seguridad– en la cárcel ubicada en las instalaciones de la Policía Federal de Curitiba.
La referida interpelación le tomó cinco horas al equipo de fiscales peruanos. El objeto del cuestionario fue hallar más luces sobre las anotaciones que la Policía Federal de Brasil halló en las agendas y teléfonos celulares de Odebrecht respecto a políticos y empresarios peruanos: específicamente, anotaciones que presuntamente involucrarían en actos ilícitos a los exmandatarios, Alan García Pérez (AG) y Ollanta Humala y, por otro lado; descifrar la sonada frase: «Aumentar Keiko para 500 e eu fazer visita», que involucraría a la excandidata presidencial Keiko Sofía Fujimori Higuchi.
Pero, hay más, las 40 preguntas, que, según el propio Vela fueron respondidas con “exhaustividad” y “detalles”, no solo se enfocaron en los tres políticos en mención (AG, KF y OH), sino que también siete de las 40 consultas fueron encausadas a los ilícitos que cometió Odebrecht y Barata en suelo peruano con sus exsocios: Graña y Montero, ‘JJC Contratistas Generales S.A.’, ‘ICCGSA’ y Compañía San Martín S.A.
Empresas constructoras peruanas que, según parece, estarían siendo blindadas por el Gobierno Central y por el PJ, incluso por el MP; dado que hasta la fecha los consorciados de O. Latinvest siguen operando a sus anchas en el Perú, inclusive pretenden licitar nuevamente con la administración de Kuczysnki (GyM), como si no hubiera pasado nada.
Una de las preguntas de los fiscales peruanos formuladas a Marcelo Odebrecht fue sobre cómo sus consorciados participaron en los sobornos para que Odebrecht Latinvest se adjudique –de manera delincuencial– multimillonarias licitaciones públicas; a lo que Marcelo Odebrecht ratificó lo que señaló su brazo derecho, Jorge Barata:
“El pago ha sido por Odebrecht, pero el resto de las empresas sí tenían conocimiento, no detalles, pero sí sabían que existía el acuerdo. Lo que si es cierto es que se distribuyó entre los consorciados. No recuerdo la fórmula exacta, esto lo verificaré. Esto fue más o menos así, ellos sabían que habíamos pagado, y sabían que tenían que asumir lo que le correspondería”, sostuvo Barata. Asimismo, Marcelo señaló que: “tenían un contacto sumamente especial con Graña y Montero”.
En otras palabras, Marcelo Odebrecht y Jorge Barata, por primera vez, desde que estalló el escándalo ‘Lava Jato’, coinciden hasta en un 100 % en sus declaraciones. La situación de Graña y Montero, ahora sí, es muy grave; pues las acciones de esa firma se han desplomado históricamente en la BVL (cayó 19,35 %) y en la BV de Nueva York (Cayó 13,5%) no bien que el mundo se enteró de la injerencia en temas iliciticos que tuvo, según Odebrecht, la indicada compañía constructora de capitales peruanos.
CONCLUSIÓN:
Supongo que, en un trabajo conjunto entre el Ministerio Público, la Fiscalía y el Ministerio del Interior, a estas alturas de la mañana, de hoy, 11 de noviembre de 2017, siendo las 11:30 A.M., unos 2.500 agentes de la Policía acompañados con fiscales y representantes del Estado ya están allanando las oficinas de: Graña y Montero, ‘JJC Contratistas Generales S.A.’, ‘ICCGSA’ y Compañía San Martín S.A., y por ende, están apresando a altos funcionarios de esas firmas entre ellos, Pepe Graña, ¿Verdad? Ah, pero, olvidé que Pablo Sánchez y Hamilton Castro son los fiscales. En fin.