A la mayoría de las personas les gusta las historias sobre monstruos. Y es que siempre se han tejido leyendas acerca de criaturas que viven en tierras lejanas o profundos lagos .
Sin embargo, hay una criatura que ha desafiado todas las leyendas, alcanzado una fama mundial: el chupacabras.
Según un reportaje de la BBC, un investigador estadounidense analizó de analizar los relatos, videos e incluso el ADN de este misterioso animal para explicar científicamente su procedencia.
Benjamin Radford, es quién realizó la investigación, el pertenece al Comité para la Investigación Escéptica de EE.UU., al interesarse por este mito cuando comenzaron a aparecer supuestos cuerpos de la criatura a principios de la década del 2000 en el estado de Texas.
Origen
Cuenta Benjamin Radford, del Comité para la Investigación Escéptica, de Estados Unidos, que la primera persona que vio al chupacabras fue Madeylen Tolentino, de Canóvanas, este de Puerto Rico, en 1995.
En aquella oportunidad, Tolentino describió al chupacabras como un ser terrorífico, parecido a un extraterrestre, a quien divisó frente a la ventana de su casa.
Radford explica que el mito del chupacabras revela, en parte, los arraigados sentimientos antiestadounidenses en América Latina, la popularización en esos años de la Red y, curiosamente, por el filme de ciencia ficción ‘Species (Especie mortal)’.
La película fue estrenada en 1995, coincidiendo con el año en el que se produjo el primer avistamiento del ser. Su trama habla de unos experimentos científicos secretos del gobierno estadounidense, que acaban generando una criatura que coincide con la primera descripción del chupacabras. Se da la casualidad de que el film fue rodado parcialmente en ese mismo país caribeño.
“Diría que el chupacabras es el primer monstruo de internet” sostiene Redford.
El chupacabras es considerado responsable de la muerte de ganado, al cual supuestamente succiona la sangre a través de unas perforaciones en el cuello.
La explicación de la muerte del ganado también llegó sin mucho misterio.
“Los cuerpos (hallados de los supuestos chupacabras) eran perros, coyotes o mapaches, e incluso uno era un pescado”
“Desde mi punto de vista no hay ninguna razón para creer que exista algo extraordinario en los ataques al ganado”, concluye Radford.
Este tipo de animales por lo general son víctimas frecuentes de depredadores comunes en la zona, como perros o coyotes.
No es raro que estos animales muerdan en el cuello cuando atacan, y dejen los cuerpos en el sitio, por lo que la víctima muere de hemorragia interna, sin que muestre otras heridas más allá de las perforaciones en el cuello.
Sin embargo, a pesar de su análisis, y de todas las investigaciones que demuestren que es solo un mito, la historia del chupacabras tiene todos los elementos para seguir atrayendo creyentes, sin importar lo extraño o remoto que parezca.
[Datos: BBC mundo]