Escribe: Suriel Chacon
La señora Petronila Gonzales, también conocida como Doña Peta, mamá del capitán de la blanquirroja, Paolo Guerrero, volvió a ser maltratada por los representantes de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), cuando quiso de buen corazón asomarse a los seleccionados, con el objeto de hacer llegar las palabras de aliento de Guerrero para con la oncena inca antes del crucial partido contra Nueva Zelanda por la etapa de la repesca de cara al Mundial Rusia 2018.
Sin embargo, a Doña Peta nadie la recibió en el lugar de la concentración y ni siquiera le habrían abierto la puerta. Solo la atendieron dos miembros del cuerpo de seguridad de la FPF, quienes de manera prepotente y pedante le dijeron que no podía ingresar porque “no había ningún tipo de autorización”; sin embargo, cuando el presidente Pedro Pablo Kuczynski llega sin previo aviso al hotel donde se concentra la oncena peruana, ahí sí todas las puertas se abren.
La pregunta es: ¿Kuczynski, un ciudadano extranjero, vale más que una ciudadana peruana, como Petronila Gonzales, madre de Paolo Guerrero? ¿Por qué los altos funcionarios de FPF, empezando por Juan Carlos Oblitas, están adoptando comportamientos que colindan con la traición a la patria? ¿Quiénes carajo se han creído estos sinvergüenzas que comen comida caliente tres veces al día gracias al impuestos de todos los peruanos? ¿Por qué la FPF ha traicionado a Paolo Guerrero y lo ha dejado completamente solo en este momento tan difícil?
Los agentes de seguridad de la FPF solamente atinaron a cerrarle la puerta a Doña Peta y decirle: “Lo siento, no puede ingresar”, como si se tratara de cualquier cosa.
DATO MUY IMPORTANTE:
Actualmente, Paolo Guerrero, está en Brasil armando su defensa y explicando a su club (Flamengo) sobre su conocido y confuso incidente (el resultado analítico adverso en una prueba antidopaje), como se recuerda el ‘9’ peruano fue suspendido por 30 días por la máxima entidad del fútbol mundial, la FIFA.
ESTO ES LO QUE LE DIJO DOÑA PETA A ALGUNOS PERIODISTAS LUEGO DEL DESAIRE QUE EXPERIMENTÓ:
Un periodista le pudo preguntar si se había reunido con la oncena inca y la señora Petronila Gonzales precisó que: “¡Con nadie! (no me he reunido con nadie) porque nadie recibe acá. No hay apoyo”, dijo muy incómoda Doña Peta ante las cámaras de algunos tradicionales medios de comunicación.
Pero lo peor vino después, ya que confesó por primera vez que la FPF, presidida temporalmente por Juan Carlos Oblitas, ha actuado de la peor forma con su hijo, ya que lo dejaron completamente solo en esta situación tan pero tan delicada. Según Doña Petronila, Paolo Guerrero, se encuentra actualmente desamparado, deprimido, devastado y decepcionado con esta gestión. Incluso los cobardes de la FPF le habían prohibido a Doña Peta y a Paolo de no dar declaraciones a la prensa:
“Él (Paolo Guerrero) también está incómodo con todo esto. Van a saber toda la verdad de esto. Nada más les digo. Así es (me siento defraudada por la Federación) “, sostuvo muy enfadada Doña Peta a su salida de un hotel, en San Isidro, donde se concentra la oncena nacional previo al esperado encuentro.
¡Qué desagradecidos los de la FPF!
Y, por último, luego de la humillación del que fue víctima la querida Doña Peta, incluso, así, le deseo lo mejor a la oncena peruana: “mucha suerte a estos guerreros peruanos que sacarán lo mejor de ellos ante NZ”.