Un pastor religioso, vinculado en los Estados Unidos a una Iglesia Católica de Arlington Heights fue —en un inicio— implicado en una red internacional de pedófilos; según agentes de investigación de la policía del referido Estado. En realidad, este transgresor lo negó todo en una primera instancia. No obstante, las evidencias en su contra resultaron irrefutables y tuvo que admitir conforme transcurrían los días todos sus delitos.
Se trata del ciudadano peruano que responde al nombre de: Clovis Vilchez-Parra, de 36 años de edad. Este vulnerador fue sacerdote en la Iglesia Católica denominada Misión San Juan Diego y ha admitido —durante una audiencia y ante los jueces y fiscales— que administraba y distribuía pornografía infantil a través de Internet. Debido a ello, recibió este jueves una sentencia de cuatro años de prisión efectiva, asimismo, Vilchez-Parra ya figura en el sistema de la justicia del condado de Cook (EEUU) como delincuente sexual.
Clovis Vilchez-Parra presuntamente habría cometido los mismos delitos en el condado de Rolling Meadows. Sin embargo, al verse contra la pared y ya en manos de la justicia, los abogados de religioso le sugirieron que acepte sus delitos, que ofrezca disculpas, además de pagar una reparación civil a las víctimas y, por último, pida clemencia para su caso. Por ello, no recibió una condena más severa, como la cadena perpetua.
HISTORIA:

Él es Clovis Vilchez-Parra. │Foto: dailyherald.com
Clovis Vilchez-Parra es peruano y llegó por vez primera a los Estados Unidos en 2007; luego, rápidamente la Iglesia Católica lo colocó en un puesto de trabajo en una misión denominada ‘Nuestra Señora de la Misericordia en Chicago, y después estuvo —por 18 meses— a cargo de la Misión San Juan Diego.
Clovis Vilchez-Parra fue detenido en el año 2015 luego de una exhaustiva investigación a cargo del área de lucha contra la pornografía infantil de la policía de Palatine; donde éste transgresor vivía en una vivienda de la Arquidiócesis de Chicago.
Cuando agentes de la policía intervinieron con orden judicial su domicilio e incautaron sus computadoras personales hallaron en sus discos de almacenamiento material pornográfico donde los protagonistas eran niños y niñas menores de 13 años de edad. Vilchez-Parra solía descargar vídeos e imágenes; después, intercambiaba el material con otros pedófilos en/de otras ubicaciones; según los fiscales.
No bien que estalló este espantoso escándalo religioso la arquidiócesis precisó vía un comunicado oficial que separaban temporalmente de su ministerio a Vilchez-Parra: hasta que la justicia de ese Estado resuelva el caso.
[Con información: chicagotribune.com]