Escribe: Suriel Chacon
Quien escribe este humilde artículo es, sin duda, uno de los enemigos públicos más activos en redes sociales de Martín Alberto Vizcarra Cornejo, por supuesto, que mi activismo contra Vizcarra Cornejo inició desde que salió a la luz el indignante caso ‘Kuntur Wasi’, cuando, éste último, todavía era ministro de PPK. Desde entonces, jamás cambié mi punto de vista sobre el reprochable proceder del citado mandatario y creo, valgan verdades, que nunca lo haré; al contrario, cada vez, el tiempo y las evidencias pesadas que aparecen contra Martín Alberto me indican que mi olfato periodístico nunca, al menos en este caso, estuvo equivocado.
Pero ver el enfado de Augusto Thorndike (de ‘Poder de Cuarta’, perdón, de Cuarto Poder), empleado directo y/o indirecto del delincuente mayor de la historia política del Perú, me refiero a José Alejandro Graña Miró Quesada (de GyM, socio de Marcelo Odebrecht), artífice de la trama de corrupción más vomitiva de la historia de esta parte del mundo llamado ‘Lava Jato’, me genera, como mínimo, carcajadas.
¿De verdad, Augusto Thorndike, está siendo incisivo (en el marco del nuevo escándalo llamado OBRAINSA) en una entrevista a Vizcarra? Jajaja, aunque usted no lo crea: sí, pero lo chistoso es que Augusto Thorndike, durante toda la gestión de Martín Alberto, prácticamente, fue una mansa paloma del periodismo. Incluso, Augustito fue bautizado por tuitstars como el guaripolero #1 de este régimen y jamás, cuando menos, se atrevió a hacer una pregunta incómoda al citado mandatario en casos peores a este reciente escándalo político.
Sin embargo, hoy, salió -en una entrevista que Vizcarra le concedió- con la espada desenvainada: la pregunta se cae de madura: ¿por qué Augusto Thorndike adoptó el comportamiento de un delincuente mediático y trató, como un calcetín sucio, a Vizcarra?, ¿el cambio tan repentino es por voluntad propia o acaso está recibiendo órdenes de parte de su jefe Pepe Graña? Pregunto y vuelvo a preguntar: ¿acaso ‘Poder de Cuarta’, perdón “Cuarto Poder” está sirviendo como un arma para extorsionar al enviciado presidente Vizcarra y así hallar impunidad para sus amos y jefes? Son preguntas, sin duda, que todos los peruanos nos hacemos.
Finalmente, el cambio sorprendente de hoy de Augusto Thorndike, de guaripolero a periodista chabacano y bravucón, no limpiará la turbia imagen que ya se “ganó” a puro pulso en la población peruana. Con toda honestidad: toda esta pantomima chabacana que hizo, hoy, Augusto en la entrevista a Vizcarra por el caso OBRAINSA; solo hizo realidad la frase que se suele recitar: «cuando el barco se hunde, las ratas saltan al agua, procurando salvar sus vidas»: Augusto Thorndike, haga lo que haga, ya manchó con detrito su vida y el legado que su padre dejó en el mundo periodístico, ya que este remedo de sicario mediático no da la talla ni siquiera para concluir con educación una entrevista.
AQUÍ ALGUNOS TUITS: